Análisis sobre actitud
proactiva y actitud reactiva y su relación con la planeación
Uno de los elementos más importantes
que podemos encontrar en las diferentes organizaciones son los recursos
humanos, las diversas personas que laboran en las empresas, quienes son factores
esenciales en la consecución de los objetivos propuestos debido a que ellos son
quienes gestionan los demás recursos y quienes deben enfrentar las diversas
situaciones, dificultades o cambios que se presentan al interior de las
organizaciones. Esto hace necesario que analicemos bien el tipo de personas que
se encuentran laborando, ya que existen algunas personas que con su actitud se
convierten en un obstáculo para el progreso de las organizaciones mientras que
existen otras personas que trabajan para el avance y mejoramiento de las mismas.
La
actitud de las personas pueden generar un mal ambiente laboral y afectar los
esfuerzos para conseguir las metas, este tipo de personas se conocen como
individuos con actitud reactiva, y son aquellos que se quejan constantemente,
son influenciables con facilidad, se muestran negativos ante cualquier
dificultad, se afectan por las condiciones, circunstancias y el ambiente
social, muchas veces estas personas asumen una actitud completamente negativa y
constantemente se expresan con pesimismo, además son personas que no creen en sí
mismas y se consideran incapaces de tomar sus propias decisiones por esto no
toman la iniciativa propia sino que simplemente se limitan a seguir las ideas
de los demás. (ferrer, 2014). En muchas
ocasiones estas personas se muestran con actitud agresiva debido a que se
sienten temerosas e intimidadas por los cambios que tienen que afrontar.
Además
de las personas con actitud reactiva existen otras cuya actitud es muy
diferente, estas se conocen como personas con actitud proactiva, estas personas
son capaces de emprender nuevos retos y
de enfrentarse a diversas dificultades, toman decisiones propias, son capaces
de proponer ideas y soluciones, toman la iniciativa, en muchas ocasiones prevén
problemas y sus posibles soluciones, son perseverantes y, no son influenciables
y tienen confianza en sí mismos.
Es
así como en una organización existen personas que llevan la iniciativa y
mientras que hay otras personas que los siguen, las primeras son las personas
con actitud proactiva mientras que los otros tienen actitud reactiva, este sería
un caso en el que ambos estarían trabajando por el bienestar de la empresa unos
aportando y otros ejecutando y siguiendo las ideas, sin embargo se presenta
otra situación al interior de las organizaciones y es cuando las personas con
actitud reactiva se muestra agresivas y pesimistas dañando el ambiente laboral
y social de los empleados y perjudicando la consecución de las metas planeadas.
Muchas
veces el lenguaje verbal nos permite identificar el tipo de actitud que tenemos
por ejemplo: una persona proactiva en su lenguaje expresa: ¡voy hacerlo! ¡Puedo
hacerlo! ¡Soy capaz! ¡Quiero hacerlo! Mientras que una persona con actitud
reactiva dice: no puedo, es imposible, ni modo yo soy así, tengo que hacerlo,
no voy a hacer nada, dejando ver en ocasiones su baja autoestima y algunas
veces su pesimismo.
(R., 2013) Ambas
actitudes presentan ventajas y desventajas las
cuales son objeto importante de análisis. Las ventajas de las personas
proactivas es que se caracterizan por ser emprendedores, toman la iniciativa y
son líderes naturales, se enfocan en el logro de una meta hasta lograrla así
mismo las desventajas de esta tipo de personas es que en muchas ocasiones
tienden a ser rebeldes y algunos se convierten en autoritarios. Mientras que
las personas con actitud reactiva tienen entre sus ventajas: siguen con
facilidad a las personas proactivas y sus ideas, aceptan de forma natural a las
demás personas y entre las desventajas encontramos que en ocasiones pueden
comportarse como personas agresivas, no tienen iniciativas.
Considero
que es necesario tener ambos tipos de personas en la empresa puesto que unos
tienen iniciativa y liderazgo mientras con los otros están dispuestos a ejecutar
las ideas propuestas, sin embargo cuando una de estas personas con su
respectiva actitud ejerce influencia negativa en la organización no es
conveniente porque generan un mal
ambiente laboral y pueden ser un
obstáculo en la consecución de los objetivos que se planearon. Al momento de
elegir entre personas con actitud proactiva y reactiva se puede decir que las
empresas prefieren las personas con actitud proactiva debido a que trabajan con
más esmero, liderazgo, creatividad, perseverancia en las organizaciones y con
capaces de afrontar con mayor facilidad los cambios y las dificultades al
interior de las mismas.
Para
deducir que tipo de actitud tenemos es cuestión de realizar una autoevaluación
y un autoanálisis en el que observemos como manejamos las situaciones, la
manera de relacionarnos, la actitud y en muchas ocasiones el lenguaje con el
que nos expresamos.
BIBLIOGRAFIA:
·
ferrer,
m. (8 de enero de 2014). Jaime, mi dulce guerrero. Obtenido de
http://jaime-dulceguerrero.com/eres-reactivo-o-proactivo/
·
R., L.
L. (14 de enero de 2013). psico escritos. Obtenido de
http://psicoescritos.blogspot.com/2008/12/proactiva-o-reactiva-qu-tipo-de-persona.html
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